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· 13 minutos de lectura

Series de formación: Cómo realizar una prueba de espirometría básica

Cómo realizar una prueba de espirometría
Con una buena preparación, una técnica de formación adecuada y un buen espirómetro es posible realizar fácilmente pruebas básicas de espirometría
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Tabla de contenido

En el ámbito del diagnóstico, las pruebas de función pulmonar son una de las herramientas más infrautilizadas. El sector de la neumología se ha considerado, desde hace mucho tiempo, como un ámbito en el que se utilizan equipos complejos y en el que hasta la prueba de función pulmonar más básica y sencilla requiere que los pacientes se desplacen a cualquier otro centro, lo cual implica tiempo y planificación adicional para los pacientes. Esto no solo supone una carga adicional para los pacientes, sino que aumenta los riesgos de retrasar la atención sanitaria, puesto que, actualmente, los laboratorios especializados en PFP están saturados con las pruebas para la COVID-19. En algunos casos, se pierde por completo a los pacientes, que se cansan de ir cambiando constantemente de centro y de profesionales.

Sin embargo, un programa de PFPpuede integrarse fácilmente a cualquier consultoría, ya sea de medicina general, de asistencia médica preferente o centros de atención primaria que forman parte de otras organizaciones de mayor tamaño. Al añadir los servicios de PFP, cualquier consultoría se convierte en un centro de atención médica centrado en el paciente. Además, si se tienen en cuenta los ingresos que pueden generar, suponen una inversión económicamente interesante. Aunque siempre viene bien contar con un especialista (como un terapeuta respiratorio) para añadir valor adicional a estos servicios, el personal existente puede recibir la formación necesaria para realizar las pruebas de PFP básicas (pero extremadamente útiles) como la espirometría.

Antes de realizar las pruebas de espirometría

Imaginemos que en su consultoría se ha decidido añadir las pruebas de espirometría a la lista de servicios y su equipo está preparado para realizar las pruebas a su primer paciente. Antes de empezar a realizarcualquier prueba de espirometría (ya sea el primer paciente o el número cien) deben comprobarse algunas cosas1.

En la línea de salida

Una vez realizadas todas estas comprobaciones, es momento de ver cómo se mueve el aire en los pulmones del paciente. De nuevo, es importante recordar algunos detalles esenciales para garantizar la precisión de la prueba y, como consiguiente, del diagnóstico. Los datos obtenidos podrían verse alterados si se pasa por alto alguno de estos puntos; por suerte, resulta relativamente sencillo verlos y corregirlos.

Posición: La mejor manera de realizar la prueba de espirometría es en posición sentada.3Sin embargo, curiosamente, en los documentos de orientación de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES), en un estudio que se utilizó para crear un conjunto de valores predichos para la prueba de espirometría, se solicitaba a los pacientes que realizaran la prueba en bipedestación (de pie). 4No obstante, en otros estudios (entre otros, los que se incluyen en las directrices de la ATS/ERS) se ha demostrado que, siempre y cuando el paciente se siente en posición erguida, la dinámica pulmonar es la misma que en bipedestación, y realizar la prueba en posición sentada resulta más seguro para los pacientes en caso de sensación de mareo. El paciente debe tener los pies completamente apoyados en el suelo, para reducir la carga de los músculos abdominales y que le resulte más sencillo hacer presión y realizar el máximo esfuerzo de exhalación. Por último, la barbilla del paciente debe estar ligeramente elevada, para abrir al máximo las vías respiratorias (no solo las fosas nasales que, idealmente, deberían estar bloqueadas con una pinza o unos tapones).

Realización de las pruebas de espirometría

¡Llegó el momento de la verdad! Ya está todo preparado, es hora de pasar a la acción. Esencialmente, la espirometría es una maniobra forzada para obtener la capacidad vital forzada (FVC) y el volumen espiratorio forzado en el primer segundo (FEV1) del paciente. En el documento de la ATS/ERS, esta maniobra se divide en cuatro partes:2

  1. inhalación máxima
  2. Exhalación o espiración forzada
  3. Exhalación prolongada (durante, al menos 6 segundos y no más de 15 segundos).
  4. Otra inhalación máxima

Estas distintas partes pueden resultar extrañas o incómodas para quienes no se han sometido nunca antes a una prueba de espirometría, ya que son muy diferentes a la respiración habitual. Por ello resulta tan importante preparar y animar a los pacientes durante la realización de la prueba. En algunos casos se permite al paciente realizar una respiración normal antes de una inhalación máxima; en otros, se le solicita que realice la inhalación máxima justo antes de introducir la boquilla en la boca. Personalmente, tiendo a sugerir la segunda opción. Cuando realizo una prueba de espirometría, indico al paciente que inspire profundamente y llene los pulmones tanto como pueda y, a continuación, observo cómo se introduce la boquilla entre los labios y sobre la lengua antes de solicitarle que exhale. Insisto mucho en la importancia de sellar los labios alrededor de la boquilla a lo largo de toda la prueba para que no se produzca ninguna fuga de aire.

La fase de exhalación forzada es la más desconcertante, especialmente para quienes tienen síntomas de insuficiencia respiratoria. Puede provocar un acceso de tos, lo cual invalida la prueba y resulta molesto para el paciente. No obstante, para obtener el volumen espiratorio forzado en el primer segundo (FEV1) –una medición esencial para la espirometría–, es necesario realizar el máximo esfuerzo. Del mismo modo, prolongar la exhalación más allá del punto en el que el paciente siente que ya ha terminado puede resultar extraño o incómodo, pero es necesario para obtener la medición de la FVC. Por todos estos motivos, la implicación del profesional sanitario resulta esencial para motivar al paciente. Las posibilidades de obtener un resultado aceptable aumentan considerablemente cuando el profesional encargado de realizar la prueba anima contantemente al paciente con frases como «venga, venga, venga» o «sigue soplando». Por último, mientras se observan los resultados que van apareciendo en el sistema, puede terminarse la prueba solicitando al paciente que inhale de nuevo al máximo para completar el bucle de flujo del volumen y poder evaluar la disfunción de las vías respiratorias altas.

Recta final

Una vez completado el primer esfuerzo aceptable, tanto el profesional sanitario como el paciente tienen más claro cómo abordar esta prueba. Según los resultados obtenidos, y las observaciones y la experiencia del profesional sanitario, este puede volver a dar algunas instrucciones al paciente sobre determinadas partes y felicitarlo por las partes que realizó correctamente. Por su parte, el paciente ya se encuentra en terreno conocido y puede adaptar la técnica para seguir mejor las instrucciones e informar al profesional sanitario sobre cualquier tipo de efecto adverso que podría afectar al desarrollo de la prueba, como dolor o mareo. Es importante que el paciente y el profesional colaboren y se adapten al dispositivo lo más rápidamente posible, porque cuantos más esfuerzos realice el paciente correctamente (o casi), más cansado estará. En general, se considera que no deben realizarse más de siete u ocho intentos. A partir de ahí, los resultados pueden ser inconsistentes o subóptimos. Cuando se realicen las pruebas de espirometría a pacientes pediátricos, pueden realizarse más esfuerzos, siempre y cuando el FEV1 no baje del 20 %.2 En cualquier caso, deberán realizarse al menos tres pruebas, ya que para que un resultado pueda considerarse reproducible, es necesario obtener tres mediciones del FEV1 y la FVC dentro del 5 % o equivalentes a 150 ml de las medidas correspondientes. El espirómetro indicará la aceptabilidad y replicabilidad de las mediciones en cuanto se obtengan y se indicará al profesional que puede finalizar la prueba. En los casos en los que se alcanza el número máximo de pruebas o en los que la prueba debe detenerse antes debido a efectos adversos (o porque el paciente se niega a seguir realizando esfuerzos), es posible que se hayan obtenido algunos datos válidos. El profesional encargado de realizar las pruebas valorará los resultados obtenidos. Incluso en estos casos, deberán comunicarse los datos obtenidos, pero se añadirán las advertencias pertinentes.

Por último, según los resultados de la primera serie de pruebas (y el tipo de prueba solicitada) puede que sea necesario realizar una prueba posbroncodilatadora. Esta prueba consiste en la administración de un broncodilatador de acción corta (por lo general, algún tipo de salbutamol), seguida de una pausa para permitir que haga efecto y la realización de otra serie de pruebas de espirometría para comprobar si existen cambios en el FEV1 y la FVC. Si no es necesario realizar otras pruebas, deberá observarse que el paciente tolera el procedimiento y completar las tareas administrativas (como la introducción de datos, o la impresión de resultados) ¡y ya estaría terminado el proceso! Una vez completada la prueba de espirometría, los resultados están listos para interpretarse según las directrices de su centro.

Facilidad de uso

Nolan Bushnell, un legendario desarrollador de videojuegos (y fundador de la cadena de restaurantes Chuck E. Cheese) dijo que «los mejores juegos deberían ser fáciles de aprender pero difíciles de dominar».5 Puede que la espirometría no sea un juego, pero el principio es muy similar. Dominar los conceptos y las maniobras involucradas en las pruebas de espirometría puede llevar un tiempo, pero son relativamente fáciles de realizar. Solo es necesario un poco de motivación, ganas de animar a los pacientes y prestar atención a los detalles.


  1. Moore VC. Spirometry: Step by step. Breathe. 2012;8(3):233-240. doi:10.1183/20734735.0021711 ↩︎

  2. Graham BL, Steenbruggen I, Barjaktarevic IZ, et al. Standardization of spirometry 2019 update an official American Thoracic Society and European Respiratory Society technical statement. Am J Respir Crit Care Med. 2019;200(8):E70-E88. doi:10.1164/rccm.201908-1590ST ↩︎ ↩︎ ↩︎

  3. Moore VC. Spirometry: Step by step. Breathe. 2012;8(3):233-240. doi:10.1183/20734735.0021711 Graham BL, Steenbruggen I, Barjaktarevic IZ, et al. Standardization of spirometry 2019 update an official American Thoracic Society and European Respiratory Society technical statement. Am J Respir Crit Care Med. 2019;200(8):E70-E88. doi:10.1164/rccm.201908-1590ST ↩︎

  4. Centers for Disease Control and Prevention (CDC). Respiratory Health Spirometry Procedures Manual. NHANES Man. 2008;1(January):http://www.cdc.gov/nchs/data/nhanes/nhanes_07_08/b↩︎

  5. Bushnell’s Theorem: Easy to Learn, Difficult to Master. Wolfshead Online http://www.wolfsheadonline.com/bushnells-theorem-easy-to-learn-difficult-to-master/#8db01. Accessed February 11, 2021. ↩︎


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