Diagnóstico del asma en pacientes pediátricos: beneficios de una buena asistencia para conseguir resultados de espirometría precisos

El asma es la enfermedad crónica más frecuente en niños y niñas y afecta a millones de personas en todo el mundo.¹

Sin embargo, es una enfermedad difícil de diagnosticar a los más pequeños, especialmente a menores de 12 años. Los síntomas, como sibilancias, tos y dificultad para respirar, suelen coincidir con los de otras afecciones, por lo que los pacientes más jóvenes pueden tener dificultades para realizar correctamente las pruebas de espirometría. Por ello, la espirometría, combinada con un asistente como Buddy, supone un cambio revolucionario en la gestión y el diagnóstico del asma.

¿Por qué utilizar la espirometría? #

La espirometría ha sido ampliamente reconocida como el método estándar para evaluar la función pulmonar. En menores de 4 años ayuda a:²

• detectar la obstrucción del flujo aéreo;
• evaluar la reversibilidad tras el uso de un broncodilatador;
• supervisar la respuesta al tratamiento a lo largo del tiempo.

Pero no todo es tan fácil. Los más pequeños necesitan que se les guíe correctamente para realizar la prueba de manera adecuada, ya que, de lo contrario, los resultados pueden ser incorrectos e incluso inutilizables.

Asistencia: el ingrediente secreto para la espirometría pediátrica #

Los niños y niñas no saben cómo tomar una inspiración profunda y cómo expulsar el aire de manera forzada durante seis segundos sin que nadie se lo explique detalladamente. Por eso, contar con un asistente adecuado supone una gran diferencia. Un asistente de espirometría debería ser capaz de:

• utilizar un lenguaje adaptado a sus pacientes con ejemplos que les resulten atractivos (por ejemplo «sopla como si tuvieses que apagar todas las velas de tu pastel de cumpleaños»).
• realizar una demostración de la prueba.
• dar ánimos y consejos a los pacientes.

Convertir la espirometría en una prueba atractiva con incentivos visuales #

En ndd hemos diseñado herramientas —como Buddy, el nuevo asistente de espirometría o incentivos animados (como elefantes y pasteles de cumpleaños) — para ayudar a los más pequeños a concentrarse en la prueba y mantener la motivación durante los ejercicios. Estas herramientas:

• hacen que la prueba se convierta en un juego
• ofrecen consejos en tiempo real
• ayudan a los más pequeños a entender qué se espera de ellos

Con el apoyo adecuado, incluso los pequeños de 4 o 5 años pueden obtener resultados de espirometría fiables.³

Qué buscan los profesionales con las pruebas de espirometría #

Una vez realizada una prueba de calidad, los profesionales observan:

• el cociente FEV1/FVC: un cociente reducido puede indicar la presencia de una obstrucción.
• la respuesta a un broncodilatador: un aumento del FEV1 de ≥12 % y ≥200 ml corroboran el diagnóstico de asma.⁴

Estas medidas objetivas, combinadas con los antecedentes y los síntomas del paciente pediátrico pueden ayudar a confirmar la presencia de asma o apuntar a otra enfermedad.

Reflexiones finales sobre la espirometría en pacientes pediátricos #

El asma no puede diagnosticarse solo con un estetoscopio, especialmente en pacientes pediátricos. Hay que armarse de paciencia, creatividad y apoyo para atender a los pequeños pacientes. Con el enfoque adecuado, es posible realizar pruebas de espirometría extremadamente eficaces. Además, cuando los pequeños sienten que cuentan con el apoyo de los profesionales y se sienten comprendidos, es más probable que den lo mejor de sí.

¿Quiere conocer a Buddy, nuestro asistente virtual de espirometría, y descubrir cómo puede ayudarle en su consulta? Para ver a Buddy en acción, haga clic aquí.

Escrito por

• 

  Buddy

  Expert spirometry coach